INTERDECOR BILBAO trabajó en una reforma de un bajo de 40m2 en Santutxu. Dado el tamaño de la vivienda, la cual era básicamente un rectángulo alargado, y las necesidades de los clientes, una pareja joven, decidimos dividir la vivienda en tres zonas; la zona de descanso, la zona de estar y cocina, y el baño.
Tipo de proyecto: Reforma vivienda
Los propietarios de la vivienda querían un estilo en tonos claros y neutros, por lo que se opto por paredes y techos blancos, combinados con los grises de los hormigones (protagonistas de la vivienda) y los tonos cálidos de la madera, aplicados en encimeras y suelo, siendo el suelo de un tono más claro que el de las encimeras, con la finalidad de mantener dicha claridad, sin restar calidez al conjunto global.
Acorde con el diseño seleccionado, se colocaron los muebles de la cocina en blanco brillo, con encimeras de madera de pino alistonada. Con el fin de mantener la continuidad estética, se creó una barra baja en la cual poder comer y trabajar, con cuatro sillas de diseño moderno en blanco y madera. A su vez, para dar más presencia a la encimera, se opto por continuarla por la pared hasta el techo y extenderla (por el techo) hasta el final del mueble de la cocina, formando un espacio de diseño único, rematado por un aplique decorativo, útil para trabajar. Teniendo en mente el diseño moderno, se colocaron tiras de LED empotradas en el techo en lugar de focos, formando una iluminación única y pocas veces vista. Del mismo modo, se opto por dar más presencia al hormigón dejando las vigas y pilares visto, iluminándolos con tiras y focos LED RGB, aportando mayor protagonismo y decoración a la zona de estar. En cuanto al dormitorio, como no podía ser de otra manera, el hormigón es el protagonista, siendo la estructura de la cama y las mesillas completamente en este material, aportando ligereza y modernidad al conjunto de la estancia. Con fines decorativos, se colocaron unas piedras blancas bajo la zona de las encimeras y se empotraron focos LED en la estructura de hormigón, creando una iluminación indirecta acogedora. Para rematar la zona de descanso, se forro el cabecero con un papel pintado negro imitación a piel de cocodrilo , combinado con la ropa de cama y los estores. En cuanto al techo, se colocaron placas decorativas perforadas para insonorizar y dar un aspecto acogedor de «cielo estrellado». Tras terminar la obra y con la vivienda ya amueblada, les entregamos a los clientes las llaves de su nueva y moderna vivienda. Quedaron encantados, y a vosotros ¿qué os parece?.
Vivienda con Hormigones en Tonos Cálidos